Por que El rugby élite

Este Blog esta hecho para todo el mundo que le guste el rugby y ademas para poder compartir, expandir nuestro deporte tan amado.

sábado, 31 de diciembre de 2011

LAS FUENTES DE OBTENCIÓN

Rugby Infantil

Scrum – Line-out – Salidas

El juego evoluciona hacia una mayor dinámica.
Menos cantidad de formaciones fijas.
Mayor tiempo de juego neto.
¿Que tenemos que hacer?

Entrenar en la justa medida las formaciones fijas.
Entrenar las formaciones fijas como parte del juego y no como un juego en si mismo.
Jugadores polivalentes

Los jugadores deben tener la mayor cantidad de experiencias posibles.
No debemos caratular a los jugadores.
Son muchos los jugadores que cambian de puesto a lo largo de su carrera deportiva.
Los jugadores deben rotar por los distintos puestos, Forwards o Backs, hasta menores de 12 años, como mínimo.
Esta rotación se puede realizar durante los partidos.
Es más importante para el jugador aprender los roles y funciones antes que las técnicas individuales por puesto.
El juego dinámico debe ocupar el mayor tiempo posible del jugador.
SCRUM

Símbolo de nuestro deporte.
El propósito es el de reiniciar el juego, de una forma segura, rápida e imparcial, luego de una infracción menor o de una de una detención.
Es la acción del juego que más riesgo representa para el físico del jugador.
Debemos garantizar la seguridad del jugador entrenando técnicas adecuadas.
Formación del scrum

La técnica es muy importante para la seguridad del jugador

Espalda derecha, cabeza levantada, siempre la altura de la cadera por debajo de la de los hombros.
La toma entre los jugadores debe ser fuerte.
El hooker debe tomar a sus pilares por encima de sus hombros.
Los segundas líneas y alas forman por debajo del glúteo de los primeras líneas y el octavo por debajo del de los segundas líneas.
Las piernas deben estar poco flexionadas y casi en la misma línea, al no haber empuje no deben haber posiciones que lo permitan.
La distancia de entrada debe limitarse lo máximo posible.
El hookeo se debe hacer por el canal 1 (entre las piernas del pilar izquierdo) para que fluya lo más rápido posible.
Importante entrenar:

Correcta posición del cuerpo.
Posición de la cabeza en caso de derrumbe




Posición Incorrecta Posición Correcta

Posición del hooker muy peligrosa













LINE OUT
El propósito es el de reiniciar el juego segura, rápida e imparcialmente, después de que la pelota ha salido al touch, con un lanzamiento entre dos hileras de jugadores.

Técnicas del line-out

El lanzamiento de la pelota y el salto deben ser entrenadas con técnicas específicas.
El lanzamiento se debe realizar con una sola mano.
Los saltadores deben interceptar la pelota.
Los saltadores deben tomar la pelota con ambas manos, evitando los cacheos.
La pelota debe fluir rápidamente, evitando las formaciones móviles.
El ó los jugadores que están alrededor del saltador deben evitar que los adversarios pasen y tomen al medio scrum.
En el rugby infantil esta prohibido levantar a los saltadores

Importante entrenar:

Lanzamiento y recepción de la pelota
El salto
Toma de la pelota en el aire con ambas manos
Cobertura del saltador cuando cae al piso

SALIDAS

Mitad de cancha

Se efectúa al comienzo del partido y en el reinicio luego del entretiempo.
Se efectúa luego de marcar tantos.
22 metros

Se utiliza para reiniciar el juego después de que un jugador atacante ha puesto o llevado la pelota al in-goal, sin infracciones, y un jugador defensor ha hecho muerta la pelota allí, o se ha ido al touch in-goal o sobre o más allá de la línea de pelota muerta.
Técnicas individuales de salidas

Equipo atacante

Patear la pelota alta para favorecer la llegada de sus compañeros.
Los jugadores que van a buscar la pelota deben mirarla continuamente.
Deben tratar de llegar con la pelota y conseguirla para su equipo.

Equipo defensor

Deben informar la decisión de tomarla.
Deben recibirla yendo hacia adelante.
Deben buscar avanzar.
Debe ser apoyado rápidamente por sus compañeros.
No deben proponer una formación pre establecida.


Fuente:Entrena Rugby

PLANIFICACIÓN DEL MOVIMIENTO GENERAL DEL JUEGO

Ordenando los objetivos por división de rugby juvenil

Factores clave

•Mirar la defensa desde chicos
•Apoyar profundo
•Recibir la pelota corriendo
•Correr derecho (orientar los pies hacia el ingoal)
•Entrenador en el juego
•Jugar dinámico (dos pelotas)
•Correcciones cortas y concisas
•Método moderno de enseñanza
•Extraer situaciones y analizar
•Hacer pensar y hablar a los jugadores



Errores más comunes de los jugadores

•Apoyar plano
•Correr hacia el lugar de pase
•Falta de comunicación
•Recibir detenido
•Jugar estructurado (sin mirar la defensa)
•Ir al contacto cuando hay espacio libre
•Con la pelota adelante y al tronco
•Jugar muy erguidos
•Ir al piso sistemáticamente
•No utilizar las opciones dentro de la defensa y arriesgar pases inseguros
•Jugar solo desde el 10
•Repetirse con pases internos del 10
•Utilizar demasiados jugadores para conservar
•Apurarse a definir arriesgando la conservación
•Reposicionarse caminando y sin mirar al rival
Errores más comunes de los entrenadores

•Permanecer siempre mirando de afuera
•Confundir movimiento general del juego con “partidito”
•Dejar movimiento general del juego solo para el final de la práctica
•Hablar solo de los errores y no elogiar aciertos

Conclusión

•El gran desafío de los entrenadores de rugby juvenil tiene que ser formar jugadores polivalentes (no equipos), para jugar un rugby dinámico y esto solo se logra “conservando y luego utilizando inteligentemente la pelota ante una defensa desordenada”

Fuente:Entrena Rugby

Ser Arbitro también dentro del campo es una profesión peligrosa

Los árbitros, que también si no fuera por ellos , no habría partido justo.
por eso le dejamos este pequeño homenaje de su profesión dentro del juego

LOS CÓDIGOS ÉTICOS

Los círculos deportivos y educacionales se han dado cuenta, cada vez más, que el placer y la realización en el involucramiento de los chicos en el deporte requiere su total participación.

Es importante que el entrenador aproveche este deseo de participar. El entrenador provee el medio ambiente controlado, dentro del cual figura la participación de los jugadores, física, emocional y mentalmente hablando.

Un código de éticas para el entrenador debe ser claramente establecido. Esta lista de actividades y métodos de involucramiento representa un medio por el cual los entrenadores juzgan su contribución para el equipo y para el jugador.

CODIGO DE ETICAS PARA LOS ENTRENADORES

El entrenador debe ser imparcial en su trato con los jugadores.

El entrenador no debe concentrarse en los mejores jugadores. Los menos hábiles necesitan, por lo menos, el mismo tiempo, si no más.
Utilice los jugadores más aptos para entrenar a los jugadores menos hábiles.
El entrenador debe tener un plan para el equipo o tratar de jugar de una forma que permita a todos los jugadores usar las aptitudes que ellos han estado practicando.
El entrenador no debe hablar de algunos jugadores a sus espaldas.
El entrenador debe dar el ejemplo.

Respetar las Leyes. Enseñar a los jugadores que ellas son un convenio mutuo, que nadie debe dejar de lado o quebrantar.
Respetar a los oponentes; sin ellos no habría partido alguno.
Respetar a los dirigentes, especialmente a los referees, por que el referear es su diversión y de la cual tienen derecho a extraer un buen momento.
Aparecer como un adulto capaz, aseado y de buenos modales.
Sea puntual, esté bien preparado, conozca el asunto y sea constructivo.
Recuerde que el deporte debe ser considerado como un elemento de un hábito de buen estado físico de toda la vida y, con el fin de que pueda ser aplicado, la experiencia debe ser constructiva y placentera.
Es dando un buen ejemplo que se gana respeto y una comunicación que deriva en un buen medio ambiente de entrenamiento. Es difícil de ganar y fácil de perder.
El entrenador debe reforzar positivamente las acciones de los jugadores.

La crítica debe ser positiva, entremezclada entre el elogio por las cosas bien hechas y progresos sugeridos por las cosas no tan bien hechas.
El entrenador debe sugerir formas de mejorar las técnicas y dar alternativas para hacer algo de una manera diferente y en un a forma más efectiva.
El elogio debe estar de acuerdo con la ocasión y si bien esto puede ser dificultoso para juzgar, una regla general es la de reforzar constantemente la buena actividad.
Los jugadores que creen estar teniendo éxito, progresarán más rápidamente que los otros.
El entrenador debe involucrar a los jugadores en la toma de decisiones del equipo.

Esto dependerá largamente de la madurez de los jugadores. En general, los jugadores jóvenes deben ser alentados para que sean alguna parte de las decisiones a tomarse.
Este involucramiento debe ser controlado y puede ser fácilmente una parte de las sesiones de práctica, por ejemplo: pidiendo opiniones al terminar cada práctica. Para obtener opiniones útiles el entrenador debe estar preparado para escuchar, pero los jugadores deben comprender que la palabra final la tiene el entrenador.
El entrenador debe fijar metas realistas para el equipo y sus jugadores.

Recordar que jugar rugby es sólo uno de los pedidos que se hace respecto al tiempo disponible de los jugadores y los propósitos fijados para el jugador y el equipo debe reflejar esto.
Las metas deben ser alcanzadas y no basarse en los resultados, pero sí en la adquisición de técnicas y aptitudes por parte de los jugadores y del equipo.
Las metas deben ser explícitas y específicas y pueden ser elegidas conjuntamente con los jugadores. Todos deben conocer estos propósitos y si ellos son resueltos con los jugadores, estos se sentirán comprometidos en su aplicación.
Con jugadores muy jóvenes, tratar de trabajar con una sola meta es un ejercicio muy valioso. Implícito en esto es que las metas y objetivos deben reflejar el carácter del equipo y no el de un “equipo ideal”.
El entrenador debe tener la mente abierta en el tratamiento de los jugadores en sus actitudes respecto al juego.

Esto involucra ser un buen “escuchador”, escuchando éxitos así como problemas.
Escuchar debe ser practicado. A menudo no es lo que se dice directamente sino lo que está detrás de las palabras lo que es más importante.
Los entrenadores deben tratar de mantenerse al día con los cambios en el juego y usarlos para mejorar la actuación de sus jugadores. El propósito del entrenador es pasar al jugador al siguiente nivel como un jugador competente.
El entrenador debe ser concienzudo, conocedor y efectivo en los métodos de entrenamiento.

Asegúrese que el equipamiento y las facilidades son suficientes en cantidad, en buena condición y apropiadas para la edad y habilidad de los jugadores.
Las prácticas deben ser tan frecuentes y tan largas como lo permita la madurez de los jugadores. Es preferible tener una práctica corta, ágil y alegre que una que se alarga indefinidamente y tensiona la capacidad de concentración de los jugadores.
Durante una práctica, siga estos simples procedimientos:
Arranque el trabajo con aptitudes conocidas y pase a las nuevas aptitudes.
Trabaje desde lo simple a lo complejo.
Trabaje con el individuo, con la pareja, con el grupo, con el equipo.
Divida las actividades y las técnicas en una serie de etapas simples.
Asegúrese que sus instrucciones sean expresadas en forma simple, específica y que no sean largas.
Corrija faltas, pero balancéelo manteniendo la continuidad en al práctica.
Si los jugadores deben retener todo lo que han aprendido y lo usan en el partido, el ambiente de juego debe estar relativamente libre de tensión.
Si existe una pequeña cantidad de tensión, como puede ocurrir antes de un partido, el entrenador debe evitar la tentación de dar a conocer las últimas “joyas” de consejo.
El entrenador debe ser honesto consigo mismo y con los jugadores.

Los entrenadores deben darse cuenta que si dicen la verdad siempre, ellos no caerán en la trampa que las inconsistencias pueden crear.
El entrenador debe estar informado todo el tiempo, profesional y médicamente hablando.

Cuando se trata de cuerpos inmaduros y en crecimiento, ningún éxito para el equipo vale el agravamiento de una lesión recibida por un jugador.
Esto se aplica particularmente a:
Lesiones en la cabeza.
Lesiones en las articulaciones, p.e.: tobillo, rodillas, caderas, espalda, cuello, hombros, ya que daños en estas partes vulnerables pueden tener efectos de largo plazo.
Es responsabilidad de los entrenadores saber lo que es seguro y efectivo.
El entrenador debe tener conocimientos de primeros auxilios.
Un botiquín al costado del campo debe ser provisto por el club, para atender a los jugadores.
El entrenador debe crear un medio ambiente alegre, en el cual jugar el juego.

Recordar que los chicos juegan para divertirse, siendo el triunfo sólo parte de ello.
Nunca ponga en ridículo o le grite a los chicos por cometer errores o por perder un partido. “Un chico no es un adulto pequeño”.
CONCLUSION

Este código de éticas da a los entrenadores un modelo constructivo contra el cual puede medirse su comportamiento como tales. El código alentará a la participación continúa y en el juego y levantará su nivel.


CODIGOS DE JUEGO LIMPIO

A continuación, se indican códigos para padres, maestros, referees, administradores, espectadores y jugadores, reflejando el código de los entrenadores.

Se indica a continuación los Códigos de Juego Limpio:

Para devolver los elementos de alegría y satisfacción al chico participante.
Para alertar a los adultos de que los chicos juegan para propia satisfacción y no necesariamente para satisfacer a los adultos o miembros de su propio grupo de edad.
Para mejorar el estado físico al alentar la participación, haciendo el juego más atractivo, seguro y disfrutable.

CODIGO DE LOS PADRES

No fuerce a un chico a participar en el rugby cuando no lo quiere hacer.
Recuerde, los chicos se dedican al rugby por su propio gusto, no por el de usted.
Aliente a su hijo a jugar conforme con las Leyes del Juego.
Enseñe a su chico que el esfuerzo honesto es más importante que la victoria, de forma que el resultado de cada partido sea aceptado sin lamentaciones indebidas.
Cambie la derrota por un triunfo ayudando a su chico a trabajar en el mejoramiento de aptitudes y buen comportamiento deportivo. Nunca ridiculice o recrimine a su chico por cometer un error o perder un partido.
Recuerde que los chicos aprenden mejor por ejemplos. Aplauda las buenas jugadas de su equipo y la de los miembros del equipo oponente.
Nunca cuestione el juicio de un referee y nunca su honestidad.
Apoye todos los esfuerzos para erradicar el abuso verbal y físico del rugby de chicos.
Reconozca el valor y la importancia de los entrenadores, que son todos voluntarios. Ellos dan su tiempo y recursos para proveer rugby a su chico.

CODIGO DE LOS MAESTROS

Aliente a los chicos para que desarrollen las aptitudes básicas del juego y eviten la especialización en el juego posicional durante sus años formativos.
Creé oportunidades para enseñar espíritu deportivo, de la misma manera que usted haría al enseñar las aptitudes básicas.
Asegúrese que los esfuerzos tanto por mejorar aptitudes como el espíritu deportivo, son recompensados con elogios.
Recuerde que los jugadores son también alumnos; sea por lo tanto razonable en sus pedidos de energía y entusiasmo.
Asegúrese que el aprendizaje de aptitudes y las actividades de juego libre tengan prioridad sobre competencias altamente estructuradas para chicos muy jóvenes.
Prepare a los chicos para tener éxito en las competencias, dándoles previamente instrucciones en las aptitudes requeridas.
Hágase un compromiso personal para mantenerse informado sobre principios básicos firmes de entrenamiento y los principios de crecimiento y desarrollo de los chicos.
Ayude a los chicos a entender las diferencias entre el juego que ellos practican y el juego de adultos que ven en la televisión.
Ayude a los chicos a entender las responsabilidades e implicancias de la libertad de elegir entre el juego limpio y el juego sucio.
10. Haga que los chicos se den cuenta del valor del buen estado físico en el rugby y su valor, a lo largo de la vida, en la recreación.


EL CODIGO DEL REFEREE

Modifique las reglas y regulaciones para equipararla al nivel de aptitudes de los jugadores.
Use su sentido común para asegurarse que el espíritu del juego para chicos no se pierda por “demasiado silbato”.
Asegúrese que tanto dentro como fuera de la cancha el comportamiento es consistente con los principios del buen deportista.
Después del partido felicite a ambos equipos por su buen juego, cuando esas felicitaciones son merecidas.
Sea consistente, objetivo y cortés.
Hágase un compromiso personal de mantenerse informado sobre los principios básicos del referato y los principios de crecimiento y desarrollo de los chicos.

CODIGO DE LOS ADMINSITRADORES

Asegúrese que existan iguales oportunidades de participación en el rugby para todos los chicos que deseen jugar.
No permita que el juego se convierta primordialmente en uno par el entretenimiento de los espectadores.
El equipamiento y las facilidades deben ser apropiadas para el nivel de madurez de los jugadores.
Las Leyes debe tomar en consideración la edad y la madurez de los jugadores.
Recordar que se juega por su propio valor. Reduzca la importancia de los premios.
Distribuyan un Código de Eticas a padres, entrenadores, jugadores, espectadores y dirigentes.
Asegúrese que los padres, entrenadores y jugadores comprendan su responsabilidad en el juego limpio en el rugby.
Asegúrese que exista una correcta supervisión provista por entrenadores apropiados y referees capaces de promover un buen espíritu deportivo y buenas aptitudes técnicas.
Organice seminarios para mejorar los niveles de entrenamiento y referato, con énfasis en el buen espíritu deportivo.

CODIGO DEL ESPECTADOR

Recordar que los chicos juegan deportes organizados para su propia diversión. No están allí para dar un espectáculo para usted y ellos no son All Blacks en miniatura.
Compórtese bien. No use lenguaje soez o mortifique a jugadores, entrenadores o referees.
Aplauda las buenas jugadas de su equipo y del otro también.
Muestre respeto por los oponentes de su equipo. Sin ellos allí no habría ningún partido.
No ridiculice o rete a un chico por equivocarse durante un partido.
Condene el uso de violencia en todas sus formas.
Respete las decisiones del referee.
Aliente a los jugadores para que jueguen conforme a las Leyes del Juego.

CODIGO DEL JUGADOR

Juega para divertirte, no para satisfacer a tus padres o al entrenador.
Juega respetando las Leyes del Juego.
Nunca discutas los fallos del referee.
Controla tu genio.
Juega bien para tí mismo y tu equipo. Tu equipo se beneficiará por tu actuación y lo mismo te ocurrirá a tí.
Sé buen deportista. Reconoce las buenas jugadas, ya sean de tu equipo o del oponente.
Trata a todos los jugadores como te gustaría ser tratado. No interfieras a ningún jugador, no lo amenaces o tomes una ventaja ilícita.
Recuerda que el propósito del juego es divertirse, mejorar tus aptitudes y sentirte bien.
Coopera con tu entrenador, tus compañeros de equipo y con los oponentes, porque sin ellos no habría partido.


Fuente:Entrena Rugby

LA PSICOLOGIA Y LAS LESIONES

Exceso o falta de motivación, temperamento, umbral de tolerancia al dolor y al fracaso, baja autoestima, desconcentración, son algunos de los factores que predisponen la vulnerabilidad a las lesiones, las cuales más allá de su dolor y sufrimiento, influyen en la imagen corporal, social y calidad de vida de todo deportista.

Todos los que han pasado por este estado saben bien cómo altera nuestro comportamiento, los procesos cognitivos, las relaciones interpersonales y estados de ánimo, ya que nos encontramos sumamente irritados, alterados y de mal humor.
Una lesión es un ataque al Yo, es una fuerza que irrumpe desde el exterior causando un repliegue hacia nuestra interioridad en la necesaria elaboración de los afectos dolorosos que producen toda pérdida, en este caso la imposibilidad física que invade la vida del jugador remarcando un antes y un después del juego en sí mismo; el que gana, el que pierde, el que se lesiona.

La psicología del deporte ha venido contribuyendo desde hace ya años a la prevención y rehabilitación de las lesiones. Datos de investigación han estudiado casos donde muchos deportistas juegan mucho mejor después de una lesión y vamos a tratar de entender por qué pasa esto y que procesos intervienen.
En la antigua filosofía de las lesiones en el deporte –muchos de los jugadores de mayor edad lo entenderán mejor- se trataba a una lesión solamente desde la parte biológica y traumatológica. Las emociones y la parte afectiva eran descartadas y, en ciertos casos, la legión de los lesionados no era tenida en cuenta, los cuales se consideraban fuera del equipo y en soledad ante la recuperación, situaciones donde cada uno se tenía que arreglar en su desesperación de la mejor manera que pudiera. Los lesionados tampoco seguían yendo a los entrenamientos cayendo en un aislamiento mayor y más difícil de superar.
A principios de la década del '70 la actitud hacia las lesiones comenzó a ser tenida en cuenta, pensándolas más como causa y efecto de distintos procesos, evaluando no solamente cómo habían sucedido, sino también el porqué y ante qué situaciones se generaban. Esto produjo un cambio radical en la implementación de medidas preventivas como ser alimentación, suplementos nutricionales, dieta adecuada, descanso, ejercicio específico, uso de protectores corporales –casco, hombreras, protector bucal, etc.-. Dentro de lo referido al entrenamiento también se comienzan a implementar nuevos aprendizajes para enseñar al jugador a saber cómo caer, cómo tacklear, diferenciar situaciones peligrosas.
Es así que comienza a integrarse la psicología junto al deporte, estudiando al hombre en situación y en relación de una manera global descubriendo factores predisponentes de personalidad junto a una combinación de condiciones y situaciones que colocaban al jugador en riesgo.

Algunos de los factores predisponentes que la psicología ha estudiado se resumen a continuación.

» Un elevado umbral de ansiedad genera conductas de agresividad y agresión donde el jugador dominado por su impulsividad, ignora datos relevantes de peligro de la realidad.
» Al reducirse el campo atencional se pasan por alto señales e información elemental del juego, desatendiendo sensaciones corporales y dando pie a decisiones equivocadas. El estrés produce un estrechamiento de consciencia donde importante información es dejada de lado.
» Al jugar sobreactivado, es decir por encima del 100%, aumenta el cansancio y el agotamiento, donde el físico muchas veces no tiene tiempo en su total recuperación cayendo en el famoso burnout ante situaciones de exigencia internas o externas.
» La falta de conexión con el dolor físico facilita entrenar más de lo debido o seguir jugando con molestias por miedo a perder el puesto o ser tildado de débil.
» Una prolongada exposición al estrés, produce una caída en el sistema autoinmune, con cambios en el sistema endocrino volviendo a la persona más vulnerable a enfermedades.
» La probabilidad de lesión se incrementa ante una lesión previa y cuando el jugador no se encuentra psicológicamente listo para volver a jugar. En estos casos ante el miedo a la repetición, se tensan músculos que no intervienen en el movimiento de manera defensiva para proteger la zona lesionada. Por otro lado, ese mismo miedo genera temor a jugadas de riesgo como en el caso del rugby, a tacklear, ser golpeado o caer bajando la performance del juego.
Ante situaciones y evaluaciones personales negativas hay tendencia a exceso de entrenamiento. Es una manera de buscar afuera la seguridad que no se tiene dentro lo que genera, en cierta manera, la seguridad adicional de que el sábado se va a jugar bien. Debemos remarcar que es sumamente importante la parte física como lo es la disciplina mental.
Un jugador ansioso, nervioso, rígido, con miedo a lesionarse, no puede permitir que su creatividad y libertad de movimiento fluya, sino todo lo contrario, queda encerrado, encapsulado en su temor, lo que ocasiona un pobre desempeño. Aunque no lo puedas creer, mientras más estés pensando en cuidarte, más difícil será hacerlo ya que solamente estás ofreciendo una resistencia corporal que produce rigidez en tu cuerpo y en tu mente. Si estás jugando y comenzaste a reprocharte “cuidado con el hombro, cuidado con la rodilla”, ese espacio mental de creatividad y juego está ocupado con otro contenido que puede ponerte en problemas ya que estás tratando de hacer consciente algo de tu juego que ya está incorporado, cuando en un buen rendimiento hablamos de un jugar inconsciente de jugadas que se hacen mecánicamente.
El jugador de nuestro tiempo se encuentra de por sí estresado. El ritmo de vida cotidiano no es el mismo de otras épocas, donde se llega cansado, se duerme mal, hay mayores problemas económicos y laborales. Los entrenamientos no ocupan el mismo lugar que en otras épocas donde había más tiempo y distensión para todo. Hoy en día vivimos sumergidos en el reino de la inmediatez y la eficacia. El estrés viene de las demandas exteriores en la búsqueda de los valores socioculturales basados en el prestigio, buscando el éxito en un continuo reconocimiento de la mirada del otro.
Ese gran deseo en juego genera presión. Ante el mínimo error o cambio en el marcador, ante eso que se pierde y no tolerando su pérdida, genera agresión, impulsividad, no se piensa, directamente se actúa por medio de la agresividad verbal o física. Tras la agresividad verbal, sobreviene la tarjeta y hasta podes dejar al equipo con un jugador menos. Tras la agresividad física, podes lesionarte y/o lesionar a otro.
Estos temas también forman parte de la prevención, ya que hay que enseñar el manejo de la emoción y de conductas tanto dentro como fuera de la cancha, enseñar al jugador a cuidarse física y mentalmente.
Si bien muchas de las presiones no pueden ser eliminadas, en cuanto a la prevención y rehabilitación, se le otorga al jugador estrategias y técnicas para amortiguar su impacto. Alguna de ellas son: relajación, visualización, imaginación, autoconversación.
También en cuanto a la prevención es importante la relación medico-jugador y la total confianza que te dé tu equipo de médicos y kinesiólogos. Si confiás en ellos y te dicen “Salí a jugar que estás bien, tu lesión está totalmente curada”, saldrás a competir bajo esa creencia, conservando la capacidad para jugarte y ser capaz de afrontar todos los riesgos porque te sentís asegurado. Pero, si no confiás en tu equipo profesional, seguirás realizando tus propias conclusiones y ante el mínimo dolor –el cual es totalmente esperable ante una lesión- ya te imaginarás que es una nueva señal de alarma de repetir la lesión, aunque esto sea solo verdad en tu imaginación.
Asimismo se debe tratar de analizar cuál es la interpretación que cada uno le da a cada evento deportivo, ya que la carga emocional de cada percepción tiñe del mismo modo la percepción exterior. Esto se explica al ver que cada uno responde de manera diferente ante distintos estímulos ambientales y en relación a diferentes vivencias personales de cada uno.
El soporte social, familiar y profesional y de equipo, es sumamente importante en la rehabilitación. Es poder sentirse sostenido y comprendido ante situaciones de estrés para poder construir nuevamente el sentimiento de seguridad y confianza para volver al deporte. Esta contención emocional nos devuelve en espejo la comprensión del otro y la ayuda a una rápida y más segura rehabilitación. Acordémonos que si bien el jugador de rugby demuestra una imagen de fuerza y poderío, por sobre todas las cosas es un ser con todas las debilidades y conflictos que significa ser humano.


Fuente:Entrena Rugby
Lic. Julia Alvarez Iguña
Psicología aplicada al Alto Rendimiento

LA CONTINUIDAD

El proceso al que me quiero referir está estrechamente vinculado con dos de los principios que rigen el ataque: el de avanzar y el de presión del avance. Este proceso es la CONTINUIDAD.
Su perfeccionamiento es lo que le dará al ataque, desde el lanzamiento desde las formaciones y en el movimiento general del juego, la llave para abrir defensas, para jugar eficientemente, adelante, adentro y detrás de la defensa.


Si graficamos un proceso continuo ¿qué figura nos viene primero a la mente?
Exacto...: una línea recta, con un punto de inicio y un punto final.
Si graficamos con esta recta un movimiento de ataque, nos encontramos con la típica jugada del rugby infantil, en la cual un jugador mueve la pelota, corre y marca puntos, real para ese nivel de aprendizaje, más difícil cuando el nivel sube a juveniles, casi imposible de realizar en el nivel de la división superior y ni hablar del alto nivel.
Pero esta utopía del ataque lineal de una sola fase es a lo que deberíamos tender para que nuestros movimientos tengan éxito.

Continuidad , dinámica y velocidad
Antes de continuar, quisiera analizar estos tres términos que usamos habitualmente en nuestra jerga de entrenadores, pues generalmente se entienden como tres procesos del mismo nivel. Veamos:
Dinámica: Forma de suceder una cosa, conjunto de fuerzas que actúan en un sentido.
Velocidad: Relación entre el espacio recorrido y el tiempo empleado en recorrerlo.
Continuidad: Duración o permanencia de una cosa sin interrupción.
De estas definiciones surge que:
- Es necesario generar movimientos CONTINUOS, sin interrupciones.
- A éstos se les debe agregar DINÁMICA, o sea, que todos actúen en un sentido.
- Y finalmente, que esto se haga a la VELOCIDAD necesaria para cumplir el objetivo planteado.
Por lo tanto, en PRIMER LUGAR, hay que perfeccionar movimientos sin interrupciones, pues de lo contrario, la dinámica y la velocidad perderían sentido por sí solas, y es más, serían contraproducentes.

La línea recta

No voy a incluir en este análisis el ataque que proviene del juego con el pie, pues patear supone una interrupción del movimiento, y las patadas que no lo generan porque se recupera la pelota directamente sin que el contrario pueda intervenir, son movimientos técnico-estratégicos que merecen un análisis particular.
Tampoco lo haré con el movimiento de avance continuo que supone el maul, pues esta formación semi-fija también tiene objetivos que merecen un análisis por separado, aunque en el rugby actual empieza a ser un arma de ataque mucho más útil que el ruck.
Sí me voy a referir a todas aquellas situaciones que supongan la búsqueda de los espacios, avanzando y en carrera.

Volviendo a la línea recta, los movimientos de ataque entre el inicio y el fin tienen una cantidad de puntos intermedios que son lo que llamamos FASES. Lo primero que se debe hacer para lograr continuidad es:

- Trabajar en lo técnico para que el punto final del movimiento sea un try, evitando la discontinuidad y la consecuente pérdida de posesión por fallas de pase, knock on, pelotas trabadas y errores no forzados.
- Tratar de eliminar las fases como hecho estratégico y empezar a trabajarlas como algo que puede, pero que no debería suceder.

La fase se tiene que generar por un acierto de la defensa y no por un déficit del ataque, y los puntos de encuentro deben considerarse situaciones geográficas debidamente conocidas de antemano. Los jugadores, pese a saber que se puede producir este meeting point, deben jugar fijando el objetivo en el in goal contrario; es más, cuanto mayor sea el nivel del equipo, mayor será la cantidad de fases programadas que tendrá, lo cual no quiere decir que se tengan que generar adrede.

SIEMPRE, los jugadores tienen que intentar penetrar, traccionar y pasar -en el punto de penetración- o generar el espacio para que un compañero penetre, y todos los jugadores, tanto penetradores como apoyos, tienen que saber que el arma más importante para reducir el número de fases en el avance es EL PASE.
En estos movimientos, hay que privilegiar el pase por sobre el ruck y trabajar muy duro para generar en los equipos la confianza necesaria para que la pelota vaya al piso lo menos posible.También se debe hacer un trabajo enorme con todos aquellos que juegan sin la pelota, para que la profundidad y la garantía de apoyos sea algo incorporado al juego propio.El ruck tiene que ser la consecuencia de la imposibilidad de pase, y tiene que ser resuelto en el menor tiempo posible, acompañado por el menor tiempo posible de reposicionamiento ofensivo. Esto garantizará eficacia continua en ataque, pero no eficiencia, pues se pone en riesgo la POSESIÓN.
¿Cuántos jugadores vemos a diario que, ante el más mínimo contacto, van al piso a jugar un ruck?
¿Cuántas veces oímos la orden “¡ ruck !”, o “¡andá al piso!”?
Leído en forma superficial, el hablar de eliminar fases suena muy simple
y parece un concepto regresivo para un rugby “moderno” -porque es “complicado”- y un rugby con menos fases, más simple, sería casi infantil.Yo pienso, por el contrario, que ante defensas tan organizadas hay que buscar las formas de desorganizarlas, y si se va al piso:
- se facilita el trabajo de los pescadores y
- se ofrecen los segundos necesarios para reposicionarse
De este modo, un ataque dentro de la defensa se transforma, de nuevo, en un ataque por delante de la defensa, y encima se reduce la distancia entre la línea de tackle contraria y la línea de ventaja propia.Por el contrario, no hay maniobra que lastime más que aquella en la cual un jugador es tackleado y aun así logra pasar la pelota desde el piso.
Personalmente, pienso que maximizar la continuidad es una de las piedras basales en el juego de ataque, y hay que trabajar muy duro para lograr que la técnica individual permita tener continuidad, con dinámica y velocidad.

Autor: S.SPECTOR
Fuente:Entrena Rugby.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Penales & Free Kicks - 2da Parte

Similitudes y Diferencias

Tanto los penales, como los free kicks cuentan con muchas coincidencias o similitudes pero también con marcadas diferencias.Ambas presentan un tratamiento diferente, puesto que infracciones de distinta gravedad, merecen diferente severidad en el castigo.-

- Similitudes

Ejecución: Ambos se ejecutan en la marca (lugar de la infracción) o detrás de ella en línea paralela al touch.-

Patada: La patada desde un penal o un free kick debe realizarse con cualquier parte inferior de la pierna desde la rodilla hasta el pie, excluyendo la rodilla y el talón.-

Pelota a utilizar: En ambos casos se debe usar la misma pelota que estaba en juego, salvo que el referee entendiera que esta defectuosa.-

Scrum: Para ambas infracciones se puede elegir un scrum como variante.-

Patada al touch: El pateador puede patear efectuando un punt o drop-kick al touch, pero nunca un place kick, es decir una patada desde el suelo.-

Prohibición: El equipo infractor no debe retener, tirar o patear la pelota intencionalmente lejos del pateador o sus compañeros. Se deduce de esa norma que los jugadores del equipo infractor pueden dejarla en el suelo donde se encuentran. Ello es permitido por el reglamento y seria una forma “licita” de producir una demora en el juego.-

Lugar de la infracción: Si la infracción se produce en el ingoal o dentro de los 5 metros el penal o free kick se debe ejecutar a 5 metros del ingoal.-

- Diferencias Las diferencias entre estas dos infracciones pueden resumirse de la siguiente manera: Patada a los palos: Mientras que un penal se puede patear a los palos, los free kicks no permiten marcar un goal, ya sea mediante una ejecución desde el suelo o un drop.-

Solo se podrá patear un drop luego de que la pelota quede muerta (maul, ruck) (1), que el rival la haya jugado o tocado (2) o que el portador haya sido tackleado (3).-

Patada al touch: En los penales, luego de una patada que ha salido por la línea de touch, el equipo que debe arrojar la pelota al line out es el conjunto no infractor (el que ejecutó la patada); por el contrario en un free kick será el otro equipo el que introduzca la pelota al line out.En definitiva, en un penal el equipo conservará la posesión y en un free kick resignará la misma.-

Kicks al touch fuera de los 22 metros: En los penales, el line out deberá realizarse donde ha salido la pelota; en los free kicks en cambio, donde se ha efectuado la patada, siempre y cuando la pelota no haya salido por detrás de donde se ejecutó el kick.-

Carga: Mientras que en los penales el equipo infractor no puede cargar o presionar al que ejecuta el kick, en los free kicks puede hacerlo tanto pronto como el pateador comience su carrera (1) o haga un movimiento para patear (2).- Amague: En los penales se permite que el pateador realice un amague; en los free kicks en cambio, el pateador no debe amagar de lo contrario será penalizado.-

El Mark o Fair-Catch

El mark constituye un elemento absolutamente novedoso de este deporte y es una situacion de la que deriva un free-kick.Un equipo puede tener un free kick a su favor, no solo producto de una infracción menor del oponente, sino también como consecuencia de que un jugador –bajo determinadas condiciones- pida un “mark”.

Ante esa circunstancia el juego se detendrá y el equipo defensor tendrá un free kick a su favor.-

Algunas consideraciones importantes son las siguientes: Se podrá pedir “mark” dentro de los 22 metros propios incluido el ingoal.-

El jugador deberá atrapar la pelota limpiamente (de aire) y al mismo tiempo gritar “mark”, de lo contrario el juego continuará. Aunque la pelota haya tocado un poste o el travesaño antes de embolsarla igualmente el pedido de “mark” será válido.-

Por lo menos uno de sus pies debe estar dentro de la línea de 22 metros propios.-No se podrá pedir un “mark” desde un kick off. Por el contrario, en los kicks de reinicio (patadas de mitad de cancha luego de que un equipo haya marcado puntos) ello esta permitido.-Se debe tomar la pelota de aire, ya sea con sus pies en el piso o también en forma aérea.-

Por ultimo, el jugador que canta “mark” tendrá la opción de jugar la pelota desde un free kick o en su defecto podrá solicitar al árbitro un scrum a su favor.


Fuente:Rugby Didáctico

Penales & Free Kicks - 1º Parte

Breve Introducción
Los penales, como así también los free-kicks, constituyen la forma de inicio del juego luego de una infracción.
Es decir se otorgan al equipo no infractor por infracciones cometidas por el oponente.-
Constituye un elemento novedoso de este deporte la existencia de dos clases de infracciones diferentes: penales propiamente dichos y free-kicks.

Los penales son todas aquellas sanciones que por su grado de severidad no merecen ser castigadas con un free-kicks.
Los free kicks, en cambio, son infracciones leves y por lo tanto conllevan lógicamente una sanción menor.
Las conductas más comunes que deben penarse con free-kick se dan habitualmente en un line out como puede ser saltar con la mano cambiada o tomar o apoyarse del contrario para realizar el salto.

Ventajas y Desventajas
Por sus características propias, el inicio de juego desde penales y free-kicks presenta una serie de ventajas y desventajas evidentes que a continuación se analizan brevemente.-

- Ventajas

A diferencia de la disposición defensiva luego de un maul o ruck por ejemplo, donde la defensa se encuentra mas cerca; en los penales y free-kicks en cambio, el equipo infractor debe ubicarse a 10 metros, por lo que el equipo que ataca contará con una ventaja importante.
El hecho de poder “jugar rápido” un penal constituye también una ventaja puesto que es muy factible que la defensa no tenga tiempo para organizarse y otorgue en consecuencia ventajas.
Es indudable que una defensa desordenada y poco preparada para defender es mucho más vulnerable.


- Desventajas

Como en ninguna otra faceta del juego la defensa no esta agrupada; por ello, el espacio para atacar es notoriamente menor y en consecuencia las posibilidades de tener un ataque exitoso se ven reducidas.-
Tanto las formaciones fijas (scrums y lines) como las formaciones móviles o espontáneas (rucks y mauls) presentan un elemento en común: la posibilidad de agrupar a la defensa y consecuentemente la de crear mas espacio para penetrar.
Por el contrario, en el inicio del juego derivado de un penal o free-kick, los jugadores no están involucrados en formación alguna, por lo que están en mejores condiciones de ocupar los espacios en todo el ancho de la cancha, lo cual representa una ventaja notoria para el equipo infractor.-
En virtud de lo detallado será improbable que en la práctica –salvo penales jugados rápidamente- el ataque en primera fase termine vulnerando el ingoal o incluso prospere demasiado en el campo de juego.
Mi opinión es que cualquier ataque ortodoxo podría ser abortado fácilmente frente a una defensa diseminada por todo el ancho de la cancha.
Bajo ese cuadro de situación, el ataque desde un penal merece una solución novedosa e inteligente.
Una de las alternativas válidas, podría consistir en provocar una formación en la primera fase que permita la aparición de más espacios por fuera de ella que se pueda usufructuar en las siguientes fases.
Otro camino es el de utilizar un ataque sorpresivo o no convencional, para producir duda o confusión a una defensa que esta tremendamente atenta y organizada en esa faceta.

Fuente:Rugby Didáctico

JUGANDO POR EL LADO CIEGO

El "lado ciego", cerrado, corto o lado estrecho (según lo entiendas mejor) está en todos lados en un campo de rugby, pero solo el jugador verdaderamente intuitivo lo reconoce instantáneamente y reacciona rápido para explotarlo.

Yachvilli (medio scrum de Francia) lo reconoció en el reciente partido de Francia con Inglaterra, como lo hizo Howley y Van Gisbergen en el Munster contra Wasps de la semifinal de la Heineken Cup.

Michael Lynagh (medio apertura de Australia) lo reconocía en cada partido que jugaba y Jonny Wilkinson (medio apertura de Inglaterra) está desarrollando rápidamente la habilidad de Michael.

Usualmente los jugadores clave para explotar el cerrado son ambos medios (#9 y #10), los wines y el fullback, cinco jugadores muy importantes en el cerrado.

Ellos deberían ser jugadores de "cabeza arriba" como oposición a "cabeza baja" o jugadores parpadeantes quienes, antes de tener el balón en sus manos, han mirado rápidamente a sus oponentes y contado cuantos de ellos estaban defendiendo el cerrado con relación al abierto.

Si son verdaderamente listos, ¡quizás hayan incluso anotado mentalmente si se enfrentaban a defensores delanteros o tres cuartos!

La lógica entonces toma el mando. Si los oponentes tienen seis en un lado del origen de la posesión y solo dos en el otro, me parece que tiene que existir una razón de peso para atacar el lado fuertemente defendido. Aun así la mayoría de equipos lo hacen sin pensar. Sospecho que la mayoría de medios esperan hasta tener el balón en las manos antes de tomar una decisión. En nueve casos de diez es demasiado tarde y, tristemente, es una deficiencia muy común.

En vías de explotar el ciego, ayuda comprender que el juego se hace mucho más fácil en el momento en que el portador del balón sobrepasa a los delanteros.

El portador puede ser un delantero o tres cuartos, no es relevante. Puedes usar el ancho completo del campo y atacar desde tu propia veintidós, pero olvídate de este principio fundamental del juego si conlleva mucho riesgo.

Un jugador de "cabeza arriba", además de todo buen entrenador, sabrá que el ciego existe desde el saque de mitad de cancha, scrum y lineout además de los puntos más frecuentes de contacto entre jugadores, el ruck y el maul.

Los jugadores de "cabeza arriba" también reconocen al instante si están recibiendo balones rápidos frente a una defensa desorganizada, o balones lentos donde la defensa esta alineada y en posición, preparada para presionar sobre los futuros atacantes.

Obviamente, los cinco jugadores clave a los que nos referimos anteriormente deberían tener una comprensión telepática de lo que está pasando, y reaccionar frente a cada movimiento de los compañeros.

Al atacar el lado cerrado, usualmente la zona menos defendida, los jugadores deberían atacar el espacio a cada lado de los oponentes y no a los oponentes mismos.

Como Jeremy Guscott hace un tiempo, Will Greenwood y Ben Cohen son maestros explotando el espacio que ha sido creado por la habilidad y deseo de Inglaterra a la hora de transmitir el balón antes o durante el contacto.

Esta estrategia de equipo hace más fácil para los jugadores en apoyo el navegar entre defensores.

A partir de los saques, a menos que sean cortos y al medio del campo, siempre hay inevitablemente un lado cerrado para explotar. A veces es un pase directo del medio scrum al wing o al fullback, a veces del medio scrum a un delantero que carga.

En cualquier caso alguien y, en los ejemplos anteriores, el medio apertura, debería estar creando una distracción en el lado abierto en un intento de pasar inadvertido a la defensa.

Una vez más, esta táctica de distracción en el lado abierto forma parte de cualquier ataque con éxito por el cerrado. Profundizando en ello, una “distracción” es parte vital de cualquier tipo de ataque.

A primera vista, los laterales parecen menos propensos a producir opciones por el ciego, pero si estás jugando contra una primera línea de lateral con jugadores de lento pensar, entonces un saque bajo rápido, o un balón al primer saltador para un compañero que viene de atrás, pueden originar resultados sorprendentemente productivos.

Un lanzamiento largo que es capturado, agrupado, y el balón liberado mientras el maul aún está avanzando, también puede crear opciones por el ciego. Nunca dejes que la oposición piense que siempre atacarás el lado abierto. Mantenles adivinando.

Los scrum son oportunidades muy productivas para ataques por el lado cerrado, inicialmente a través del Nº 8 encadenando con su medio scrum o viceversa, y atacando a derecha o izquierda.

A mano derecha en el campo, un balón del medio scrum para el wing derecho, si este tiene la inteligencia para variar sus líneas de carrera, puede abrir defensas más rápido y fácilmente que un abrelatas (Diagrama N° 1)

Queda a discreción de los medios, wines y el fullback el observar el ancho del ciego de modo que solamente el número óptimo de jugadores lo utilice.

Por ejemplo, un lado cerrado de diez o quince metros es probablemente más apropiado para uno o dos atacantes. Un lado cerrado de veinte o treinta metros te da mayor flexibilidad.

Recomiendo que los entrenadores o bien estén parte del partido observando desde el fondo, o graben su partido desde el fondo. Desde este punto de vista, el espacio, o la falta del mismo, se vuelve obvio.

Tristemente, muchos medios piden una serie de movimientos que no tienen relación alguna con como la defensa a cubierto el campo.

Recientemente vi un partido de primera división en el que se perdieron tres tries, en la primera parte, porque el equipo atacante no se dio cuenta que el lado cerrado de sus "oponentes" estaba totalmente indefenso. Simple y predeciblemente movían el balón de vuelta hacia la defensa que se encontraba al acecho.

Lo más común es ver como se explota el cerrado desde un ruck o maul. Desde un balón rápido, un atacante que recibe un pase plano y golpea el espacio en velocidad puede causar serios problemas para la defensa. Repentinamente la defensa tiene que volverse, y su organización queda alterada.

Defendiendo un ruck/maul o cualquier scrum/lineout en el último tercio del campo, especialmente en el lado izquierdo de los defensores (derecho de los atacantes) requiere una preparación de primer nivel, y disciplina precisa en ejecución.


Kieron Bracken, medio scrum de Inglaterra.
El medio scrum defensor tiene un rol clave en presionar a su número opuesto y/o al número 8 contrario en balón de scrum. Kieron Bracken y Matt Dawson son verdaderos ejemplos de crear caos en la base del scrum por sigilo y cálculo de tiempos.

Atacar un brazo o el balón de un oponente inmediato puede frustrar completamente las intenciones de ataque y causar confusión en la base del scrum atacante.

El wing izquierdo defensor tiene decisiones importantes que tomar en estas situaciones de campo.

¿Se queda fuera y marca a su número opuesto o se mete dentro y toma al primer atacante? La respuesta depende de preguntas como:

1. ¿Puede un scrum defensivo girar a los atacantes y en qué sentido?

2. ¿Pueden el ala izquierdo defensivo y el número 8 ver el balón en todo momento cuando está en el scrum, sabiendo así el momento preciso de cuando abandonar dicha formación?

3. ¿Qué posición están tomando el medio apertura y el fullback en defensa?

Las tácticas defensivas quizás tengan que cambiar, dependiendo de la composición del equipo además de los conocidos puntos fuertes del oponente.

Cualquiera que sea la decisión, los defensores necesitan ser positivos y nunca deben vacilar.

La peor decisión que un individuo o un equipo puede tomar es no tomar una. Vacilar o dudar, usualmente, anota puntos en el marcador de la oposición.

El ciego puede ser uno de los muchos intangibles en un partido de rugby, pero una vez que el concepto se entiende y se utiliza adecuadamente puede traer enormes recompensas.

Es tarea de los medios el reconocer el balón rápido o balón entregado con los oponentes reculando. Esto es por lo que tienen éxito los medios.

Por lo tanto ¡toma el balón lo más plano posible, apunta al espacio, sujeta tus orejas atrás y adelante!

Autor: Don Rutheford, ex Director de Rugby de la R.F.U.
Traducción: Ignacio Martín Goenaga
Adaptación para Argentina: Rubén Ayala
Fuente: www.rfu.com

EL ENTRENADOR DE RUGBY

Hace muchos años que conocemos al autor de este artículo; Miguel García Lombardi. Ex jugador de rugby, se dedicó a través de su profesión de Sicólogo Social a colaborar con muchos equipos de rugby de nuestra Unión en como mejorar la relación entre los integrantes de un equipo (incluyendo obviamente a los entrenadores).

El Entrenador de Rugby: algunas reflexiones sobre su tarea

En estos párrafos vamos a intentar efectuar algunas reflexiones que surgen alrededor de la tarea del entrenador de rugby en la Argentina. Son introducciones a los temas, que de ninguna manera pretenden explicarlas. La pretensión es solamente mencionarlas para tenerlas en cuenta a la hora de enfrentar dificultades o asumir esta tarea por primera vez.
A los efectos didácticos vamos a dividir este trabajo en dimensiones o planos de análisis. Ellos son el entrenador como representante y responsable de un rol institucional (Dimensión institucional); como integrante de un grupo de entrenadores (dimensión integrante u horizontal); y dimensión liderazgo (responsable de un grupo de entrenadores de una división determinada).

Dimensión Institucional

El entrenador representa los valores del club. Por lo tanto es muy importante comprender que ante los otros clubes y ante el resto de la institución a la que pertenece está representando los colores, la historia, los valores y las características culturales de su club. Esta representación obliga a tener en cuenta que hay un Rol Institucional predeterminado y que después habrá una Conducta de Rol, que es la que cada uno desarrollará conforme a su estilo.
Si estos valores están definidos y expresados con claridad, desde su conducta de rol, o sea en el desarrollo de su tarea cotidiana usted los afirmará o negará con los hechos. Si en su club el respeto por el referee y los adversarios es un valor deseado, cada vez que usted protesta un fallo en voz alta estará desvirtuando los valores de su club.
Por el contrario, y por la positiva, enseñando a sus jugadores y público a respetar a las autoridades de los partidos y haciendo usted lo propio, está velando y instituyendo esos valores. Esta es tarea del entrenador.

La Misión institucional del entrenador.

Podríamos definir que la misión de un entrenador, en términos generales es dotar a sus jugadores de los motivos suficientes para que aprendan primero a jugar al rugby y luego a desarrollarse como atletas, para desarrollar el mejor juego que les sea posible. Después, y según los valores de los clubes, esta Misión estará mas o menos acotada. En general, en los clubes de Buenos Aires se valoriza la formación de los jóvenes jugadores como buenas personas, que respeten al adversario, a sus compañeros y a sí mismos.
Teniendo en cuenta esta definición el entrenador tiene un rol básicamente formativo, en un ámbito de competencia.
El entrenador de rugby entrena las capacidades técnicas individuales y colectivas de un grupo de personas que ha elegido el rugby como deporte.
Por lo tanto, no es lo mismo entrenar a un grupo de infantiles cuya elección todavía depende mas del deseo de los padres que a un grupo de jugadores que han hecho de su elección una forma de vida.
Buscaremos entonces las cosas que son comunes a todos los entrenadores, y lo primero que aparece es la capacidad del entrenador de motivar a sus jugadores para que den lo mejor de si, y a que lo hagan en una posición determinada en un lugar determinado.
O sea que el entrenador, lo más importante que tiene que lograr, es encontrar los motivos por los que un jugador desee poner lo mejor de si y dedicarle el tiempo que sea necesario para jugar en determinado puesto de un equipo.
Esta definición entonces pone a la palabra motivación en el eje central de la tarea del entrenador. Sin motivo no hay porque querer mejorar. Y lo que tiene que lograr un entrenador, lo primero que tiene que conseguir, es que los jugadores a su cargo, y los entrenadores que colaboran con él (para que les llegue a los jugadores un solo mensaje), tengan ganas de ser lo mejor que puedan en su lugar, en su rol dentro del equipo.
El entrenador es, desde lo obvio, quién provee las herramientas técnicas y de destreza física necesarias para que el jugador despliegue su mejor juego. Pero como el rugby es un deporte de conjunto, hay que agregarle a esta misión la de lograr que todos logren lo máximo en un equipo. Ese logro es en “este” equipo, en “este” rol o posición dentro de la cancha y no en abstracto. Es el pilar de este equipo, aunque hasta M17 haya sido el 8. es el apertura de este equipo, aunque haya jugado todas las juveniles de full back.
Entonces, la misión del entrenador de rugby es lograr que todos los jugadores de un equipo dado tengan la mejor predisposición posible para entrenar y jugar en la posición que el equipo lo necesite.
Esta ubicación será determinada por el entrenador, así como las tácticas y estrategias a llevar a cabo. El equipo debe estar convencido de que esas tácticas y estrategias de juego son las mejores opciones al momento de ingresar a jugar el partido, ya que son ellos mismos las que deberán sostenerlas y llevarlas a cabo.
Intentando una breve y apretada primera síntesis diremos que la misión del entrenador es orientar a cada jugador y al equipo para que desarrolle el mejor juego posible.

La comunicación

Si tomamos en cuenta que la definición de comunicación es el proceso mediante el cual los seres humanos nos influenciamos unos a otros a través del intercambio de información, emociones y datos, es claro que el entrenador, para poder influenciar positivamente en todos y cada uno de los jugadores, deberá ser un comunicador claro, confiable y previsible, que transmita confianza en los jugadores y que dote del convencimiento necesario a todos y cada uno para entrar a la cancha a jugar un partido.
Para evitar los ruidos en la comunicación, es decir, aquellas cosas que impiden un buen ida y vuelta de los mensajes, o sea que permitan una buena retroalimentación, el entrenador debe comunicar con claridad. La forma de comunicación mas clara es a través de las acciones, no de las palabras. Y si las palabras no acompañan las decisiones y acciones, se corre el riesgo de instalar malentendidos o rumores que generan climas no favorables de trabajo. Si el entrenador dice al inicio de la temporada que van a jugar los que vengan a entrenamiento primero, los que se esfuercen mas y por último los que sean mejores técnicamente, y después no respeta estas reglas de juego poniendo al mas hábil porque viene un partido difícil, esta comunicando confusión primero, descreimiento, falta de confianza en lo que dice y mal humor hacia los que mas se esfuerzan. Esta visión (el partido más difícil es lo que hay que respetar) es corto placista y no construye equipos motivados, numerosos y con ganas de trabajar.

El contrato

La mejor manera de expresar cuales son las expectativas que un jugador puede tener con respecto a su juego en un equipo, es sentar, al inicio de la temporada, las reglas de juego o pautas generales que el entrenador va a observar para definir el o los equipos.
Lo mejor inclusive es acordar con los jugadores los términos de éste texto, que entonces pasaría a ser no solo el decálogo de reglas impuestas por el entrenador, sino el contrato que los jugadores y entrenadores se disponen a observar y cumplir. Por ejemplo, establecer premios y castigos claros por falta a entrenamiento, por amarillas en los partidos (una amarilla son por lo menos siete puntos en contra), por inconducta con el club o los compañeros, etc. No se trata de prever absolutamente todas las decisiones, sino de transmitir una serie de valores que orienten las acciones del conjunto y sobre todo, que todos los jugadores de un plantel sepan que si hacen bien las cosas tienen mas chances de jugar en el mejor nivel que si las hacen mal.
Esto es muy claro en el primer equipo, en donde por torneo un equipo que juega todas las instancias utiliza no menos de 30 jugadores en la temporada, lo que equivale a mantener motivados, entrenados y en las mejores condiciones a por lo menos 35 jugadores, ya que hay que considerar las lesiones. Y para mantener motivados y con ganas de entrenar y mejorar en forma permanente a 35 jugadores hay que lograr que todos crean y comprueben que si se esfuerzan pueden tener premios. Y que si no lo hacen, pueden tener consecuencias no deseadas para su juego.
Esto generará un aumento de la competencia interna, indispensable para que los muy bueno sigan creciendo y los menos buenos no se desmotiven.
Esto no significa que se resigna el triunfo, ya que el deporte por definición implica la posibilidad de ganar o perder. Está pensado justamente para que, en el largo plazo, su equipo tenga muchas variantes. Un buen entrenador trabaja para el próximo partido sin perder de vista el campeonato.
Y esto vale tanto para profesionales como para amateurs.

La Motivación

Ser previsible significa que usted como entrenador tomará decisiones que no sorprenden a sus colegas y jugadores, ya que como escuché alguna vez, son los mismos jugadores los que se “sacan o ponen en el primer equipo”. Lo previsible es que si hacés algunas cosas, es lo mas probable que sucedan x cosas. Hay que tener políticas claras, comunicarlas bien, y ser consecuentes con ellas. Y por favor, su usted no está seguro de poder cumplir con su palabra, por favor no se comprometa a nada, porque las consecuencias de decir una cosa y hacer la contraria son muy malas para la motivación de los jugadores y el clima del grupo.

El Equipo

Un equipo es un conjunto restringido de personas que se conocen, que tienen una tarea en común y que asumen y asignan para desarrollar la misma roles o funciones preestablecidas o espontáneas. Tienen un objetivo común (que es necesario explicitar), desarrollan con el tiempo una forma particular de hacer las cosas (cultura o identidad) que se instalan a través de ritos y creencias extendidas y sostenidas por todos.
El rugby es un modelo muy interesante de lo que puede ser un equipo deseado, ya que la heterogeneidad es inherente al deporte, aunque todos tienen una tarea común. En efecto, un segunda línea es deseable que sea alto, fuerte y seguro de manos, mientras que un medio scrum debe ser ágil, veloz, escurridizo y dotado de une excelente pase. Esta diversidad también es deseable en la faz psicológica, ya que para liderar a planteles numerosos no alcanza con un capitán o el apoyo de su subcapitán. Efectivamente, y siguiendo el modelo de Los Pumas 2007, es deseable generar un subgrupo de conducción que ayude a los entrenadores a saber cómo está el equipo, para desarrollar y trabajar sobre la optimización de las competencias de los jugadores. Estas 7 Competencias o 7 C son las siguientes: confianza, convicción, compromiso. comunicación, cohesión grupal, concentración y control emocional.
Confianza: es muy importante que un jugador mantenga su confianza en su punto mas alto y que la desarrolle conforme a sus posibilidades reales, para alcanzar su más alto grado de eficacia. Saber manejar los errores es básico para mantener la confianza y seguir jugando, ya que el error es parte del juego, y hasta necesario, ya que se equivoca quién hace y arriesga. Del error hay que aprender pero no necesariamente en el partido. Si se puede pensar el error, sin perder la convicción o la concentración en la táctica establecida, bienvenida la revisión durante el match. Pero lo mejor, ante el error técnico o de gesto, es seguir y no quedarse atrapado en éste, porque baja la concentración y la confianza, tanto en uno mismo como en los compañeros. En eso, el entrenador, los colaboradores o los compañeros pueden sumar mucho, ya que si por ejemplo un jugador queda mal por haber cometido un error y “se va del partido” lo mejor es volver a meterlo con una indicación precisa técnico/táctica del juego. Por ejemplo, si falló un tackle, es marcar por donde está atacando el rival. Si dio mal un pase, hablar de cómo se mejora la marca; o las salidas, o cualquier indicación que permita, a través de la comunicación positiva o aseverativa, mejorar la confianza y la concentración de ese jugador y del equipo.
La convicción se refiere al convencimiento necesario que debe tener un equipo antes y durante el partido para jugarlo de tal manera. Si el entrenador plantea el partido de la forma A (patadas parelelas al fondo para que vengan jugando desde atrás), pero ante la primera adversidad el equipo empieza a jugar de manos desde las 10 yardas propias, es porque la táctica no es buena ni mala, sino que no creen en ella y harán lo que ellos creen o consideran mejor. Lo mismo para hacer una jugada entrenada en la semana: de nada sirve que el entrenador la grite desde el costado si el equipo no está convencido y la elige en ese lugar y tiempo. Hay que permitir que el equipo internalice las herramientas propuestas y estar abierto a que desarrollen otras. Los jugadores son los protagonistas, y eso aumenta su compromiso con el partido y con el equipo mejorando la cohesión grupal. Esta es la capacidad que tienen los equipos de estar unidos, de tener claro que cosas se comprometieron y como a llevarlas a cabo. Tener respeto y seguridad en sus compañeros. No es necesario ser amigos, son demasiados en un plantel y pueden ser muy distintos, incluso en edades. Pero cuando entran a la cancha, los 15 tienen que sentir que están jugando con sus hermanos de sangre: son a quienes cuido, quienes me cuidan y quienes permiten que todos desarrollemos nuestro mejor juego. La mayor fortaleza del jugador está en su compañero.
Los entrenadores están afuera de los límites de la cancha y “no juegan más” ni pueden teledirigir a sus jugadores. Es la herida narcisista del entrenador de rugby: bancarse que son otros los que juegan.
El sentirse protagonistas del juego genera en los jugadores un efecto contagio positivo , y los lleva a mejorar la relación con los otros. Si me equivoco y mi compañero me apoya, tomando como modelo de comportamiento a mi entrenador, aumentará la tranquilidad y el clima del equipo para bancar las presiones, por lo tanto voy a estar en una situación de control y no desbordado por las presiones.
Los gritos extemporáneos, las indicaciones permanentes, las protestas a los árbitros por parte de los entrenadores o dirigentes del club generan en los jugadores una baja en su confianza y los desfocalizan y los hacen perder su control emocional, ya que los llevan a pensar en otras cosas y no en lo único que tiene que pensar: el juego. Cuando un jugador empieza a pensar que el referee está cobrando mal, que un rival le pegó a un compañero, o que otro está “arrugando” deja de centrarse, de con centrarse en lo que tiene que hacer y en lo único sobre lo que tiene control absoluto: su rol en el equipo, sus capacidades para las que está entrenado, los deberes y tareas dentro de ese partido o libreto definido. Además de dejar de leer las debilidades tácticas y técnicas del adversario para centrarse en otras cosas que no ayudan a jugar mejor. Todo lo que haga que un jugador deje de pensar en esto en el medio del partido, es decir, en el juego, atenta contra su mejor desempeño.
El entrenador es el principal responsable de que los jugadores den su máximo rendimiento, y para eso cuenta con ellos durante toda la semana. El sábado, o si son juveniles, el domingo, los que juegan son los jugadores. Lo mejor que puede hacer su entrenador es transmitir confianza, tranquilidad y seguridad al equipo para que ellos puedan cumplir su tarea: divertirse adentro de una cancha, desarrollando seriamente el mejor juego individual y de conjunto que les sea posible. Normalmente, si eso sucede, los equipos ganan. Sino es así, es que encontraron a otro que en ese partido jugó mejor.

Autor:M. GARCIA LOMBARDI
Fuente:Entrena Rugby

Métodos para mejorar como jugador

Nuestro juego exige hoy a nuestros jugadores un estado óptimo en todos los rubros: físico, técnico, táctico y mental.
Cada uno de estos aspectos que conforman la totalidad de las capacidades de cada jugador, puede y debe ser entrenado en forma consistente.
Está claro que existen, y en gran variedad, muchos y muy buenos métodos de entrenamiento físico: estos se desarrollan tanto en sesiones con todos los miembros del equipo como en entrenamientos individuales y personalizados, abarcando sus distintas áreas (fuerza, velocidad, resistencia, reacción, flexibilidad, etc,).
En el aspecto técnico, la ejercitación de gestos técnicos es habitual, tanto de modo grupal como individual. En lo referente a lo táctico, cada vez es mayor el desarrollo de entrenamientos que apuntan a estimular la capacidad de resolución y decisión táctica del jugador en cada aspecto del juego.
En lo que aún queda bastante por hacer es en el aspecto mental del jugador. Más allá de la importancia de consolidar un grupo-equipo con su identidad y sus valores propios, de estimular el altruismo irrenunciable que el rugby pide, de buscar la cohesión y de establecer metas y objetivos de equipo, el desarrollo de las destrezas mentales o psicológicas individuales no ha encontrado aún su lugar definido dentro de la preparación de cada jugador.
La falta de tiempo, el aumento en la exigencia de los otros tres rubros, la falta de conocimiento y algunos preconceptos errados derivan en cierta indiferencia ante el trabajo sobre el aspecto mental, que sin embargo es señalado y aceptado unánimemente como muy importante e influyente en la performance de cada jugador.
Aquí mostraremos un método simple y de probado éxito que ayuda a que cada uno, individualmente y en el tiempo del que disponga, pueda mejorar los aspectos mentales de su juego que más necesite.
James Loehr, norteamericano, famoso psicólogo del deporte, ha desarrollado un método casero y fácil. Ken Hodge y Alex Mc Kenzie, psicólogos deportivos de la Universidad de Otago, Nueva Zelanda, han implementado el PST, un método más completo pero muy similar al anterior. Va aquí una muestra muy resumida de una mezcla de ambos.

Paso 1: Diseñar una lista extensa sobre todos los aspectos mentales o psicológicos a considerar.
Aquí van algunos de ellos:
Competitividad Gusto por los desafíos Energía
Resiliencia Concentración amplia Visualización
Competitividad Concentración estrecha Ritualidad
Autoconfianza Receptividad al aprendizaje Motivación
Compromiso Charla interior (self-talk) Madurez
Agresividad Manejo de la frustración Tolerancia
Autocontrol Estabilidad emocional Optimismo
Sentido de equipo Manejo del stress Paciencia
Capacidad de relajarse Actitud de servicio Disciplina
Lenguaje corporal Actitud pre-partido Responsabilidad
Capacidad de comunicarse

Estas son algunos de los aspectos mentales a considerar. Por supuesto, se pueden agregar todos los que se deseen.

Paso 2: Calificar cada uno de los ítems de la lista de 0 a 10. Una calificación de 0 a 4 indica debilidad en esa área; una calificación de 7 a 10 indica fortaleza en esa área.
Aquí hay un punto importante: no siempre es uno mismo el más indicado para calificarse.
La subjetividad innata de cada uno hace que nuestra propia imagen sea siempre más “benévola” que lo que la realidad objetiva muestra.
Muchas veces (la mayoría) conviene que la calificación sea hecha por un amigo cercano y confidente, un compañero de equipo o un entrenador, en definitiva alguien en quien se tenga gran confianza, por ejemplo.

Paso 3: Elegir, para empezar, las cuatro características en las que la calificación haya sido más baja.
Se escriben las cuatro en una hoja de papel y se hace un diagrama en la hoja en blanco. Veamos un ejemplo:

1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21… 30
Paciencia (3)
Autocontrol (3)
Charla interna (3)
Capacidad de relajarse (3)


Paso 4: Durante los próximos treinta días, estos 4 puntos serán de diaria consideración. Al final de cada día, se anota en la hoja de papel mostrada en el ejemplo:
- un signo positivo (+) si ese día se ha hecho algo útil tendiente a mejorar la debilidad señalada
- un signo negativo (-) si, por el contrario, ese día se ha hecho o ha ocurrido algo que haya empeorado ese aspecto a mejorar
- un signo (0) si ese día no se ha hecho nada sobre el aspecto a mejorar
En este punto es importante señalar algunas cosas:
- No es cuestión de autopresionarse en exceso con esto, pero sí es necesario tener en consideración permanente aquello sobre lo que se quiere mejorar. Es claro que nadie iniciaría este pequeño método si no tuviera un real y genuino interés en ello. Es claro que el mejoramiento nunca viene solo; es uno mismo quien debe producirlo, y es desde ya que requiere un esfuerzo personal y constante.
- Los treinta días bien pueden ser sesenta o la cantidad que se prefiera. No conviene que los plazos sean muy largos, ya que la rutina se transforma en enemigo de los progresos y va disipando el interés y el entusiasmo.

Paso 5: Al cabo de los treinta días, se repite la evaluación. Si se ha mejorado en los términos esperados, se hace el mismo procedimiento para las cuatro características que siguen en orden en peores calificaciones.
Si la mejoría en alguna de los rubros no ha sido suficiente, pueden hacerse dos cosas: una, insistir treinta días más; otra, hacer un nuevo intento para seguir mejorando, treinta días después, como si fuera una nueva tanda de destrezas a mejorar, luego de la segunda.

Quedan algunas consideraciones finales, no por ello menos importantes:

- Es clave para el éxito de este sencillo método que quien lo realice sepa cómo mejorar sus deficiencias. No es que estemos dando eso por sentado, es simplemente que cada destreza mental o personal tiene una forma de ser trabajada o mejorada, y el espacio que tenemos para tratar esto aquí no es muy extenso como para explayarse en cada una de ellas.
Simplificando y por ejemplo: el autocontrol mejora con self-talks adecuadas y palabras “gatillo”, la autoconfianza mejora con concentración y el desarrollo de rituales, la concentración mejora aprendiendo a relajarse y con ejercicios de visualización, la relajación reconoce tres métodos principales fáciles de implementar, y así cada cosa tiene su manera de ser mejorada.
Hay bibliografía muy recomendable al respecto, entrenadores que saben sobre este tipo de cuestiones, bastantes fuentes donde buscar. A quien tiene genuino interés por mejorar estas cosas no le resulta difícil hallarlas.

- También es útil para el buen resultado de esto que haya un monitoreo del esfuerzo que se va realizando, que bien podría hacerlo la misma persona que ayudó en la calificación de la lista original.

- Es fácil deducir que este método casero sirve para mejorar… cualquier cosa que nos interese mejorar, no sólo asuntos relacionados al rugby. Cuestiones de nuestra vida cotidiana, laboral, profesional o de relación, pueden ser incluidas dentro de este programa tan sencillo.

Nada es fácil, pero todo puede lograrse. Se necesita lo de siempre: humildad, disciplina, esfuerzo. ¿Les suena conocido?

Autor: Miguel A Hernandez
Fuente:Sanisidroclub.com.ar

ENTRENAMIENTO LANZADORES-ACADEMY FORD

En este video se muestran algunos ejercicios para entrenar a los lanzadores, es de vital importancia la eficacia de este tipo de destreza y muchas veces no lo entrenamos en la forma adecuada. Es muy importante concientizar a los jugadores que deben cumplir con este función, que la clave esta en el entrenamiento y la constancia.

Nike vestirá a Los Pumas a partir de febrero‎

Nike reemplazará a Adidas para vestir a Los Pumas, según informan diferentes medios.

La versión corrió rápidamente en las redes sociales y uno de los impulsores fue periodista especializado en marketing Claudio Destéfano.

Adidas y la Unión Argentina de Rugby llevan un vínculo de años. El actual es por 1,5 millón de dólares y vence este sábado.

La marca alemana vistió al seleccionado en casi todos los mundiales, a excepción del 2003, en el que usó Topper.

Al parecer Nike habría ofrecido el doble de dinero. No es un dato menor que Agustín Pichot, representante comercial de la UAR, está ligado a la marca norteamericana (es su sponsor y tiene una línea propia).

Hasta trascendió la fecha del estreno de la nueva pilcha: el 10 de febrero, cuando Los Pumas Seven participen del circuito mundial en Las Vegas.

2012 será un calendario histórico para Los Pumas.

Al margen de los test matches ante Francia e Italia, el 18 de agosto debutarán en el Rugby Championship (Cuatro Naciones), el exigente certamen animado por Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica.


Fuente:mundod.lavoz.com.ar

Volvemos y con muchas noticias y articulos!!!


Espero que hayan pasado una buena navidad y les dejo una foto que esta corriendo por la red y me causo mucha gracia.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Felices Fiestas!

Hola Rugbyer,

en estas fiestas le deseo paz , amor y rugby para todos. que lo disfrutes.


Felicidades.

El Rugby Élite.

nos vemos en unos días!