Un rugby diferente

Por las distintas experiencias que he transitado en el rugby, una de las mas contrastantes fue sin lugar a dudas la de los Estados Unidos. Muchos de los que vivieron o han vivido aqui, han experimentado este fuerte choque de culturas rugbísticas en una tierra donde este juego tiene un enfoque totalmente diferente al jugado en Argentina, debido principalmente a la gran falta de tradición rugbística que existe en este país.

Uno se preguntara entonces, como puede ser posible de que en los Estados Unidos no se haya continuado con la tradición inglesa de este deporte, lo que deriva en un fenomeno bastante dificil de entender. Mas aun si tenemos en cuenta que los Juegos Olímpicos de Amberes en 1920, y en París en 1924 fueron ganados por Estados Unidos derrotando a los franceses por 8-0 y 17-3 respectivamente en las finales. Claro que en esa epoca la participacion olimpica solo se limitó a dos equipos en 1920 (Francia-USA) y a tres (Francia-USA-Rumania) en 1924.

Hay quienes afirman que esto se debe mayormente a que el norteamericano le apunta más a los deportes profesionales y por esa razón hace que sus hijos practiquen deportes como el baseball, football, basketball y soccer (nuestro fútbol), aunque este en menor escala.

El juego de rugby por supuesto es el mismo si estamos en la tribuna viendo un partido, pero es muy diferente si lo vivimos desde su interior. En USA la gran mayoria de los clubes no tienen sedes sociales, ni canchas de rugby (los que las tienen, no les pertenecen, son de la ciudad o de las universidades). Al no tener sedes, muchas cosas propias de la vida de un club y vivencias de este juego se quedan en el camino. Muchos conceptos se pierden por esa NO transmision natural de valores que no se maman desde los primeros pasos de un jugador, como tal y como miembro de un grupo de intereres compartido (un club).

El rugby se practica entonces como una actividad deportiva con un escaso nivel de compromiso individual y grupal debido a esas falencias entre otros factores. Son muy pocos los que sienten el rugby con la misma pasión que lo vivimos nosotros y con ese alto grado de nivel de compromiso que tiene el jugador hacia su equipo y su club.

El rugby se vive diferente y es bastante dificil acostumbrarse a el, especialmente si venis de otras culturas rugbísticas. Un punto significativo es el corto tiempo de duracion de la temporada, lo que hace que por ejemplo en caso de las divisiones juveniles o infantiles los jovenes recurran a otros deportes para completar el año deportivo. Muchos son los ejemplos que podria mencionar que alejan o acercan un rugby del otro pero basicamente “la escuela” hace la diferencia.

En otro orden de cosas, ocurre un fenomeno interesante, muchos de los jugadores que llegan al rugby han pasado por el American Football donde se prioriza el físico y la velocidad por encima de todo. (algo no tan lejos del rugby actual) Estos chicos que empiezan a jugar al rugby ya estan acostumbrados al contacto fisico, son de gran contextura fisica y en algunos casos muy veloces, pero carecen de un componente fundamental: las destrezas basicas. Que como bien todos sabemos son extremadamente necesarias en el rugby para poder resolver adentro de una cancha las diversas situaciones que el juego presenta.

Por el tipo de deporte que es uno comparado con el otro (American Football y Rugby) se cae en la tendencia de arrastrar las caracteristicass de uno (football) hacia el otro (rugby). Si bien ambos son juegos de equipo los conceptos entre uno y otro son muy diferentes.

En el american football el jugador tiene que correr lo mas rapido posible y llegar a la linea de touchdown para anotar. Lo hara esquivando adversarios mientras sus companeros le “limpian el camino” en su carrera.

Esta tipica caracteristica del AF se traslada casi como condicion a los equipos de rugby que caen en su gran mayoria en el individualismo por encima del juego en equipo (hay excepciones por cierto). Y se carece en gran parte de un patron definido de juego.

Tambien es curioso, encontrarnos con jugadores “viejos” que mencionan sus trayectorias como “largas” con solo diez años de rugby. Ocurre que en muchos casos arrancan a jugar tarde, tan tarde que es cuando alla estamos en vias de colgar los botines. Otro mundo, otro rugby, otro país…

En una de las clinicas de scrum de la que participe hace un tiempo atras, estaba un jugador de los Eagles que llegaba a dar la clinica lleno de pergaminos y logros. El habia sido un gran jugador de football americano y empezo a jugar al rugby a los 23 años, estuvo jugando en Nueva Zelanda, y con el seleccionado norteamericano participó en el mundial del 2007 en Francia, entrenó el seleccionado juvenil de USA en otro mundial y se retiro a los 30 años. Todo eso con solo 7 años de rugby. Si leiste bien, 7 años de rugby.

Para Argentina, suena como imposible que con tan poca experiencia, haya llegado y entrenado un seleccionado nacional y haya jugado un mundial, pero aqui se dan este tipo de cosas que alla serian muy poco probables. Otro punto que me llamo la atención es ver que algunos de los jugadores que forman parte del seleccionado nacional “Los Eagles” fueran “unatached” es decir que no juegan para ningun club, situacion que en estos ultimos años se esta revirtiendo.

En la parte de coaching siguen la escuela neocelandeza y todo es copiado del pais del rugby. Tecnicas, Destrezas y Coaching en general. Estan alineados con el iRB en su totalidad y sus cursos cuentan con certificaciones a nivel mundial. Invitan a menudo a muchos ex-All Blacks entre sus disertantes, que viajan una o dos veces al año a dictar cursos y que en su gran mayoria son miembros de la Asociacion Nacional de Coaching de Nueva Zelanda. Estos cursos son por supuesto experiencias invaluables tanto para coaches como para jugadores, aunque por otro lado no son tan accesibles para cualquiera debido a los altos costos de los mismos.

En el país de la organización, donde todo es demasiado perfecto y nada esta librado al azar el rugby en sus estructuras internas de clubes esta aun a la deriva y busca dia a dia atraves de quienes los promueven desesperadamente insertarse un poquito mas en esta sociedad que parece estar dominada por esos deportes de “series mundiales”.


Fuente: Rugby Time
Autor:Pablo Csaky