Y un día dijo adiós. La tarde se prestó para que el homenaje se lleve a cabo en las instalaciones del club que lo vio nacer, con la participación de un gran número de jugadores del club, algunos de sus compañeros de seleccionado y otros invitados de lujo.
La fiesta consistió en dos encuentros y cuatro equipos: un combinado en el que se encontraban Agustín Pichot, Lucas Ostiglia, los hermanos Nicolás y Juan de la Cruz Fernández Miranda y Manuel Contepomi entre otros, los Pumas Classics acompañado de jugadores del club Lomas Athletic, como Pablo y Santiago Gómez Cora, Luciano Gallardo y José Das Neves. Además, también dijeron presente la ex primera y la actual división superior de Pucará junto al emblemático equipo de la Camada ’74.
En el primer encuentro se enfrentaron los equipos de la ex Primera y Camada ’74, en el que se impuso el segundo, el cual contó con la participación de Rimas. El primer tiempo fue aburrido y monótono, pero los muchachos se guardaron todo para el final, ya que en el segundo hubo cinco conquistas, tackles fuertes, y risas al por mayor. ¿El resultado? Fue 3 a 2 en tries para los de camiseta roja.
Pocos minutos después, las categorías menores armaron un túnel por el que entró el equipo combinado y la primera de Pucará y entre ellos apareció el agasajado del día, entre aplausos, risas y gritos. Luego de las clásicas fotos ambos equipos se dispusieron a jugar el partido.
En el encuentro central, el primer tiempo no se guardó nada porque hubo una gran disputa de la pelota en los rucks, aunque nunca faltaron los pases de lujo, de revés, los cruces y salteos al por mayor. Obviamente el scrum no se disputó y se jugó al “tira saca”. La velocidad de los muchachos del sur parecía poder ante un Combinado en el que la mayoría no estaba en actividad de alto rendimiento, pero se las ingeniaron a base de experiencia y tranquilidad, para poder emparejar y que saliera un gran partido.
Así se fue el primer chico, con Pucará ganando gracias a las intervenciones de Valentín Cruz, Mauro Comuzzi y Germán Villamil, contra la conquista apoyada por el Negro Crispo para el combinado. El segundo tiempo sería más de lo mismo, pero esta vez Rimas cambió la camiseta roja para ponerse la blanca y así jugar un tiempo para cada equipo. En una ráfaga de 15 minutos, marcaron Pablo Gómez Cora y Rimas para el combinado y Montanaro para Pucará.
Faltando tan sólo unos minutos, entraron a la cancha los suplentes de cada uno de los equipos, lo que provocó la risa de todos en la cancha y un desorden en el juego. Y, ante la mirada de todos, le dieron la pelota al Flaco para que éste se encargue de sacarla de la cancha con un zurdazo y así decretar el fin de una gran carrera que lo llevó a estar entre los mejores equipos del mundo.
Fuente y Foto: Rugby Fun
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